En el marco de los clásicos Victoriado y Lanzarina, programados para la generación dosañera, los potros Gran León y Costa Brava obtuvieron importantes victorias, catapultandose como posibles líderes de la generación que recién comienza campaña.
Ya tradicionales, estos dos eventos clásicos rinden homenaje a dos excelsos campeones de la llamada época dorada del hipismo nacional. En el caso de Victoriado (Viviani-Yeyela), lo recordamos junto a una generación de grandes corredores, a comienzos de los años sesenta, que incluía a Vélika y Socopó, entre otros. El llamado "caballo de hierro" ganó hasta 20 carreras a lo largo de sus 65 presentaciones, siendo uno de sus grandes éxitos aquella primera edición del Clásico Del Caribe, celebrada en Puerto Rico. Para participar de ese evento, Victoriado ganó su cupo junto a Vélika en una carrera clasificatoria, a la que acudió saliendo del retiro que ya lo había convertido en padrillo. Tanto fue el batallar de Victoriado que, aun en campaña, coincidió una misma tarde con el debut de Del Caribe, uno de sus primeros hijos.
El debutante Gran León, un importado en vientre hijo de Put It Back en la yegua Our Dreamer, respondió a lo mostrado en sus aprontes previos y fue capaz de derrotar al favorito Love And Music, que le dio fuerte pelea hasta el final. Este tostado de la cuadra de Parilli Jr. fue conducido por el internacional Carlos Andrés Olivero, dejando en taquilla 10,85 por ganador, demostrando ser un ejemplar de enorme futuro, logrando esta selectiva en su primera actuación. La pizarra la completaron Sinan, Damascus Dancer y Monograma, en lote de cinco participantes.
De Lanzarina también se tienen grandes recuerdos. La hija de Lance en Monería escribió gran parte de la historia hípica de finales de los cincuenta. Entrenada primero por Antonio Jacial, Nestor Ali Angulo y luego por su propietario el Coronel José Murillo, la mirandina enfrentó no solo a grandes criollos y los derrotó, sino que también lo hizo con importados, yeguas y machos, a los que derrotó por igual. Sus triunfos ante el legendario Lavandero la muestran como la gran campeona que fue, merecedora por demás de este clásico que ya va por la edición treinta y dos.
Costa Brava, una alazana descendiente de Northen Afleet del nuevo Haras La Orlyana y que entrena nuestro buen amigo Ruben Lanz, logró su segundo triunfo en tres salidas, ahora con holgada solvencia y respondiendo al favoritismo, dejando 2.20 por ganador. De nuevo derrotó a Calabaza y a Queen Of Queen, que la escoltaron sin amenaza; pero también derrotó a Awesome Flower, que acudía a la cita en calidad de invicta, y a la debutante Bucanera, primer producto de la afamada campeona Blue Secret, que fue récord en ventas por su precio de 700 mil bolívares fuertes.
Así, pues, estos dos ejemplares asumen un liderazgo que muchas veces resulta efímero, por cuanto aun no está en campaña toda la representación dosañera. Sin embargo, aun a la llegada de mejores, quedó demostrado que este par de dosañeros tiene suficiente material para brindar espectáculo a lo largo de toda su campaña, que se espera sea larga y libre de lesiones...
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